Este 8 de Junio se cumplen 151 años del nacimiento del arquitecto estadounidense Frank Lloyd Wright, considerado por muchos, uno de los principales maestros de la arquitectura del siglo XX.
Como introductor del término arquitectura orgánica, una de las obras más representativas es sin duda la Casa de la Cascada. Este clásico de la arquitectura, ha sido un constante referente de reflexión en torno al habitar debido a sus fuertes cuestionamientos acerca de la relación entre el hombre, la arquitectura y sobre todo, la naturaleza.
La obra, construida entre 1935 y 1937, fue un encargo del comerciante Edgar J. Kaufmann y su esposa como una casa de fin de semana. En ella, Wright manifiesta la intención de integrar el proyecto al paisaje como un elemento natural más del entorno.
Volúmenes que levitan sobre el agua, cimientos hechos con las rocas del lugar, materiales naturales como madera, ladrillo y roca, son solo algunos de los recursos utilizados por el arquitecto para lograr una mayor integración del edificio con el bosque que lo rodea.
Los impresionantes cambios del entorno durante el año, evidencian la búsqueda de Wright por conseguir una importante armonía con la naturaleza y una fluida relación entre los espacios interiores y exteriores.
Actualmente, la Casa de la Cascada, es considerada un monumento nacional de los Estados Unidos y funciona como museo abierto al público.